Síntomas de artrosis de rodilla

Síntomas de artrosis de rodilla

El síntoma fundamental del paciente con artrosis de rodilla es el dolor. Al principio, el dolor es muy leve, sólo aparece cuando se ha realizado una actividad física muy importante y cede rápidamente con el reposo.

Cuando la enfermedad se ha establecido, es normal que el paciente note mayores molestias cuando empieza a caminar, mejorando los síntomas después de llevar un rato andando.

Al dolor se le añade una sensación de rigidez y de dificultad para flexionar y extender la pierna, que es también más intensa después de haber permanecido mucho tiempo en reposo. Otro síntoma es la sensación de chasquido, que se produce al flexionar la rodilla.

El dolor en la rodilla es mayor cuando se sube y se baja escaleras, cuando el paciente se pone en cuclillas y cuando se camina por un terreno irregular. En artrosis más severas, el paciente puede notar síntomas incluso en reposo.

Con un esfuerzo físico mayor del habitual (un paseo más largo, por ejemplo), el dolor se reagudiza, se hace continuo e, incluso, la rodilla se hincha por formarse un derrame.

Los síntomas más habituales son:

  • Dolor en la rodilla.
  • Fallo de la pierna al cargar en ella.
  • Inflamación de la articulación.
  • Rigidez de la articulación.

En los casos en los que se alcanzan fases más avanzadas de la enfermedad, además del dolor, que se hace más continuo e intenso, el paciente sufre una disminución en los movimientos que puede realizar con la rodilla (por ejemplo, no puede flexionar o extender completamente la pierna).

También pueden aparecer ciertas deformidades de la articulación y alteraciones en la alineación de los huesos, con arqueamiento de la extremidad inferior. Es habitual que el paciente cojee  al caminar y que la rodilla se debilite, notando el enfermo con alguna frecuencia una sensación de "fallo" en la rodilla al dar los pasos.

Escribir un comentario

Código de seguridad Refescar

Enviar