El dolor y la fatiga articular son parte de la experiencia diaria de los pacientes con Artritis Reumatoide, por lo que es esencial que éstos conozcan algunas pautas y consejos prácticos para manejar estos síntomas.
Este es un síntoma común de la artrosis. Ya que se refiere a la sensación de dificultad para mover las articulaciones después de periodos de descanso prolongado, como al despertar por la mañana. Por lo que es recomendable:
1)Programar el despertador más temprano de lo habitual y emplear el tiempo extra para realizar ejercicios de calentamiento dirigidos a preparar las articulaciones para el resto del día.
2)Emplear una manta eléctrica para calentar el cuerpo y las articulaciones antes de levantarse de la cama.
3)Algunos médicos aconsejan tomar directamente una ducha o un baño caliente, que ayuda a calentar el cuerpo y las articulaciones.
Este síntoma se refiere al malestar o la sensación de incomodidad que experimentan las personas que tienen esta enfermedad en las articulaciones afectadas. El dolor puede variar en intensidad y dependiendo del cuerpo de cada persona.
1)Prestar atención en las acciones que desencadenan el dolor. Debes de estar preparado ante su aparición y llevar a cabo los pasos necesarios para reducir el dolor.
2)Realizar un ejercicio moderado, puede ayudar asimismo a prevenir el dolor, fortaleciendo los músculos que recubren las articulaciones.
3) Para reducir el dolor derivado de permanecer sentado durante un tiempo largo, es conveniente tomar pausas periódicas para realizar ejercicios de estiramiento.
4) Algo no muy común, pero recomendable llevar a cabo, es llevar un control escrito de aquellas acciones que provocan dolor. Con el fin de comentarlas durante las consultas con un especialistas.
Es la sensación de cansancio o agotamiento físico que experimentan las personas afectadas por esta enfermedad articular crónica. Aunque la fatiga no es un síntoma tan común como el dolor, puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de los pacientes.
1)Principalmente, se debe planificar con antelación las actividades diarias, estableciendo prioridades y contemplando la posibilidad de que puede resultar imposible abarcar en un solo día todas las tareas a completar.
2)Garantizar que se cuenta con el descanso necesario. Puede ser de ayuda realizar siestas de media mañana o de media tarde; así como tomarse un descanso de 15 a 20 minutos por la mañana y la tarde.
3)Es necesario que se siga un ritmo de actividades suave, ya que ayudará a evitar futuras recaídas.
Escribir un comentario